Filosofía Educativa
Mi nombre es Geovanni Pérez Pérez, actualmente curso mi sexto año de Bachillerato
en la Universidad de Puerto Rico, recinto de Mayagüez. Mis estudios están
concentrados en Ciencia Política, con una secuencia curricular en Política
Exterior y una certificación de Educación, con especialidad en Estudios
Sociales. La educación es de suma importancia para mí y el hecho de ser futuro
maestro me enorgullece.
Aquí expongo mi filosofía educativa, la misma recoge ideas principales de teóricos
como: Jerome Bruner, Howard Gardner, B.F. Skinner, Comenio y John Locke. Mi
objetivo es aplicar las teorías del constructivismo, el aprendizaje
significativo, las inteligencias múltiples y el condicionamiento operante a la
sala de clase. Además, propongo desarrollar planes de modificación de conducta a
aquellos estudiantes que así lo ameriten. Como parte de la filosofía a presentar
expongo, de igual manera, lo que se enseña en el currículo, el rol del maestro,
el rol del estudiante y el de la comunidad en el proceso educativo.
Antes de comenzar una descripción detallada acerca de la filosofía es indispensable
explicar la base. Se parte de la creencia, “al momento del nacimiento la mente
es una tabula rasa, o sea, una pizarra en blanco en la que nada
hay; todas las ideas se forman a partir de los procesos sensoriales de la
visión, el oído, el gusto, el tacto y el olfato (John Locke). Ello es así porque
los seres humanos lo primero que desarrollamos es el tallo cerebral, este tiene
presente los actos reflejos que se producen como respuestas a estímulos
específicos recogidos por neuronas sensoriales, esto significa una respuesta
involuntaria. Entonces, se niega la idea de que nacemos con unos conocimientos
innatos. El niño entra en la escuela como un ente vacío y es allí donde se le
inculcan tanto los contenidos, como todos esos principios que se consideran
harán del mismo una persona de bien. Estos son los contenidos que ayudarán a
determinar lo que la persona haga o sienta durante toda su vida de
adulto.
El niño debe construir su propio conocimiento a través de ciertas experiencias que
le brindan la vida y aquellos conocimientos ofrecidos por el maestro en la
escuela. Esta es la creencia fundamental de la teoría constructivista que
sostiene, “el aprendizaje no es un sencillo asunto de transmisión y acumulación
de conocimientos, sino "un proceso activo" por parte del alumno que ensambla,
extiende, restaura e interpreta, y por lo tanto "construye" conocimientos
partiendo de su experiencia e integrándola con la información que recibe” (Coll,
1990).
Jerome Bruner, enmarcado en la teoría del constructivismo, indica que el aprendizaje se
realiza por descubrimiento. Como parte de su teoría de la instrucción, propone
que el material debe ser lógicamente significativo y que la organización de los
contenidos debe adecuarse a la estructura psicológica del alumno. La filosofía
descrita en este documento adopta el principio y, al igual que Bruner, considera
que la enseñanza debe: propiciar la construcción intelectual, fomentar la
reflexión y el aprendizaje de procedimiento para resolver problemas. Indica
además que nunca se debe fomentar la acumulación del conocimiento. Hay que
aprender con práctica, luego de tener bases firmes y claras sobre el material.
Una vez establecido este punto, el próximo paso es pensar con qué herramientas
construirá el estudiante su conocimiento. Para esto y como parte de esta
filosofía hago referencia al teórico Howard Gardner, creador de las
inteligencias múltiples. Si se reconoce que cada estudiante posee ciertas
inteligencias que lo ayudan a construir con más facilidad el conocimiento a
través de unas áreas en específico, entonces se contestará la pregunta inicial.
Entre las inteligencias identificadas se encuentran las siguientes: la
verbal-lingüística, lógico-matemática, corporal-kinestética, visual-espacial,
musical, intrapersonal e interpersonal. En adición a estas, se ha mencionado que
el estudiante puede aprender al apelar a sus sentimientos y emociones, por esto
se habla de la posible existencia de la inteligencia emocional o naturaleza
existencial. Lo importante es identificar las distintas inteligencias existentes
en la sala de clase y trabajar con estas de la manera más eficiente, de modo que
todos los estudiantes reciban una educación completa y
efectiva.
En el proceso continuo de la construcción del conocimiento es normal encontrarse
alguna vez con conductas inapropiadas que afecten y, de alguna manera, impidan
el aprendizaje deseado. En la teoría del condicionamiento operante de B. F.
Skinner es posible hallar la solución a este problema. Debido a que Skinner es
un conductista radical, esta filosofía sólo adoptará el principio de los
esfuerzos de los refuerzos y castigos, con el propósito de premiar o reprimir
una conducta. Este principio ayudará en el proceso de modificación de conducta
de un individuo. Con él se pretende apoyar el enfoque de la filosofía que aspira
a formar un individuo integral, que no sólo se encuentre saludable y se
desarrolle en el aspecto emocional, físico social y cognitivo, sino también
moral. Al modificar una conducta de manera positiva, el estudiante mostrará un
comportamiento que proporcionará los buenos valores entre los individuos de una
comunidad.
Los estudiantes y la educación encierran un tesoro, por ende estudiar es educarse,
es hacer de la vida una llena de grandes valores. Por lo que cada padre, maestro
y comunidad escolar debe luchar por la preparación que dará la educación a cada
niño. La educación preparará al ser humano a explorar mundos nuevos, interactuar
con la sociedad y valorarse. También, brindará las respuestas necesarias a las
exigencias sociales, así como la competitividad para insertarse en un mundo
globalizado y favorecido por las nuevas tecnologías. Nuestra preparación
educativa nos ayudará a alcanzar todas y cada una de las metas que nos
propongamos. De este modo, nos dará un sinnúmero de conocimientos que nos harán
seres humanos honestos, sencillos, verticales, leales, maduros y sabios,
logrando ser capacitados y asertivos ante cualquier
circunstancia.
Es de suma importancia saber para qué debe preparar la educación a los seres
humanos, pero es importante saber quiénes influyen en dicha educación. La
familia y la comunidad tienen roles muy importantes que nunca deben ignorarse.
Hay que tener presente que los padres son los primeros maestros de sus hijos, y
continúan en ese papel durante toda la educación de los mismos. El rol que tiene
un padre es el enseñar valores, costumbres y tradiciones, lenguaje adecuado,
entre otros aspectos que se verán reflejadas en el estudiante durante toda su
vida. Aspectos que la escuela y educación pueden moldear. Los padres y la
comunidad familiar son responsables de estimular a sus hijos a estudiar. Creando
en ellos características como la responsabilidad, la creatividad y a ser niños
aplicados. La única manera de desarrollar un potencial completo en un estudiante
es la comunicación total entre la escuela y el hogar. La responsabilidad de una
buena educación comienza por los padres ya que estos tienen la toma de
decisiones sobre sus hijos, que es muy importante. Al hijo ser menor, el padre
elige el centro educativo y son quienes inculcan valores que se reflejan en el
estilo de vida de cada cual. El objetivo principal que debe tomar en cuenta la
familia es un excelente desarrollo en la educación de sus hijos, sin buscar
alguien perfecto.
La educación debe mantener una organización, esa que se refleja en el currículo que
organiza lo que se va a enseñar y demás cosas de gran importancia. Lo primordial
es establecer metas y objetivos, luego han de identificarse las diversas fuentes
de conocimiento según las destrezas que se deseen enseñar. En general, se debe
enseñar legado histórico y cultural, investigación científica, tecnología,
matemática, lenguaje, y todo aquello que logra un desarrollo y evolución
positiva en el estudiante. En el currículo se presentan los diferentes
componentes y elementos del programa educativo. El mismo es centrado de acuerdo
a las necesidades y características de los estudiantes. En cuanto a la manera
que enseñaría, establecería metas, competencias, estándares y objetivos. Luego,
programaría las diversas actividades para facilitar un aprendizaje real y activo
en los estudiantes. En cuanto a lo que se debe enseñar, lo deciden en conjunto
la escuela, el maestro y el estudiante, según sea la necesidad de
estos.
En la filosofía integral, los roles de los distintos componentes del proceso de
enseñanza-aprendizaje juegan un papel crucial. Yo como maestro seré, más que un
facilitador, un mediador entre el estudiante y el ambiente. Crearé el escenario
apropiado para que el proceso de aprendizaje se dé efectivamente y con fluidez.
Brindando al estudiante las herramientas necesarias, para que puedan edificar
las inteligencias a través de actividades que vayan dirigidas a estos estilos de
aprendizaje. Como maestro, mis cualidades estarán centradas en ser un individuo
sensible y comprensivo, desempeñándome eficazmente en posiciones como las de
amigo, consejero y de ayuda médica de ser necesario. No voy a ser autoritario,
pero tampoco permisivo. Sólo trataré al grupo con cierta autoridad para que
ninguna de ambas partes pierda el debido respeto y se logre un control adecuado.
Para lograr esto voy a mantener un excelente manejo de la sala de clase y para
que esto, a su vez, se dé, reforzaré y aprenderé aquellas conductas que así lo
ameriten con actividades de motivación y estímulos adecuados.
Es importante tener en cuenta que la evaluación es parte de las actividades diarias
de la clase. Las leyes piden igualdad para todos, siendo un gesto de justicia.
De esta manera, yo como maestro utilizaré mi sistema de avalúo igual para todos,
pero ajustado a las necesidades de cada grupo en particular. Del mismo modo
exigiré disciplinas sin distinción de estudiante. Es importante ganarse el
respeto de estos, para poder exigirles sobre su comportamiento. También, tomaré
en cuenta las individualidades y etapas de desarrollo del estudiante para
asegurarme de llegar a todos por igual. Yo como maestro, para lograr lo antes
mencionado, voy a utilizar las diferencias que se le presentan como un potencial
que trae diversos talentos al grupo y los beneficia a todos. De este modo crearé
una ambiente que invite a todos a investigar, aprender, construir su aprendizaje
de manera sencilla y a lograr las metas a corto plazo e inculcar el deseo por
alcanzar las metas a largo plazo. Por último, y no menos importante, mantendré
una comunicación efectiva con los demás componentes del proceso educativo, es
decir, escuela, familia y comunidad.
La escuela deberá ser un lugar que atraiga al estudiante, empezando por el maestro
y terminando por ofrecer actividades que motiven al niño y adolecente. La
comunidad juega un papel importante ya que debe encaminarse a cooperar con ésta
última para lograr el cumplimiento de las metas propuestas y de los objetivos
que se tiene para con el estudiante. Todo es un ciclo, la comunidad participa de
la educación formal y cotidiana del niño, la escuela formalmente lo educa con el
propósito de formar un buen ciudadano que aporte de manera positiva a la
sociedad y participe de la educación de sus futuras generación con el mismo
fin.
Es necesario lograr desarrollar cualidades en los estudiante como: que sean
educados en el aspecto de escuchar al maestro, el compañerismo, la sinceridad,
la honestidad, ser respetuosos y luchadores y tener características de un
ciudadano de bien, que no es perfecto pero si una gran persona. El rol principal
del estudiante es aprender no solo el material que se enseña en la sala de
clase, sino también a formarse como ser humano. A ser una persona con valores,
moral y capacitada para contestar las interrogantes de quién en realidad es. El
estudiante deberá convertirse en el protagonista de su educación. El mismo debe
definir sus propias metas y proponerse métodos para alcanzarlas con éxitos. Es
un orgullo ver que a los estudiantes que yo inculque el gusto, la capacidad, el
placer de aprender, la curiosidad del intelecto y demás, se hagan grandes
profesionales. Lo que espero como maestro, es que esa semilla que logre poner en
la vida de cada estudiante, dé frutos. Y que los mismos logren todas sus metas y
se hagan seres humanos de bien.
Aunque parezca irrelevante, los materiales que se utilicen en el proceso
enseñanza-aprendizaje con la meta de lograr lo que se propone, son parte
importante de este ideal filosófico. Se debe hacer el uso de materiales que sean
de gran atracción al estudiante. Por ejemplo: textos llamativos que lleven la
información para un nivel apropiado para el entendimiento del alumno, que
trabaje temas y conceptos que sean parte del contexto de la vida del niño. El
material audiovisual debe ser apto para el novel a trabajar. Es recomendable
utilizar detalles coloridos, sin caer en el extremo, con la intención de
capturar la atención del estudiante y crear un ambiente propicio para todos. A
lo antes mencionado, es necesario integrar la tecnología que avanza de una
manera acelerada y hace la clase mucho más amena, integral y
activa.
Luego de haber culminado mi metodología, de haber observado la dinámica en una sala de
clase y de interactuar directamente en clases demostrativas me reafirmo en mi
filosofía educativa. Sostengo la necesidad de ser un facilitador y mediador con
cierta autoridad para mantener el control de grupo. Es necesario controlar las
conductas de los estudiantes y facilitar un aprendizaje claro, activo,
integrador y con materiales que promuevan lo antes mencionado. Luego de esta
experiencia me percato de la importancia y la necesidad de tener una integración
más completa entre los padres y la escuela. Este factor podría ser uno de gran
importancia al ver los resultados del aprendizaje de los estudiantes. Es
importante tener presente a los estudiantes de educación
especial y las necesidades que tengan cada uno de ellos para lograr una clase
eficaz, eficiente y que lleve una educación clara, precisa y completa.
Hasta el momento, en mi práctica docente, me reafirmo en todas
las partes de mi metodología. Por la cantidad de tiempo que he dado clase me he
percatado que es necesario reforzar y ampliar la parte de conducta.
Además del principio de los esfuerzos de los refuerzos y castigos del
condicionamiento operante de B. F. Skinner, es importante acoger varias
estrategias diversas que atiendan de manera efectiva los problemas de conducta.
Estímulo positivo, ese reconocimiento para valorar y destacar conductas que
manifiestan un compromiso sobresaliente, a través del reconocimiento verbal o escrito y estímulos o distinciones especiales. Es necesario destacar al estudiante que en una unidad específica se destaque por las siguientes virtudes y cualidades: sencillez, alegría, servicio,
creatividad, lealtad, esfuerzo y confianza en sí misma. También, es importante
premiar y resaltar las buenas conductas estas que provienen del mejor compañero
que haya sido bondadoso, generoso, solidario y que mantiene buenas relaciones
con todos y todas. Además, el gran estímulo de premiar el ejemplo, los
estudiantes que siguen las reglas del salón, al alumno que llegan siempre a
tiempo y no faltan, de este modo se busca que los demás compañeros se estimulen
por hacer lo que hacen sus compañeros premiados. Un aspecto muy importante que
destaco para que sea parte de mi filosofía es la reflexión individual, como
método para lidiar con las conductas. Esta es una conversación maestro alumno a
propósito de una situación que amerite un análisis. El objetivo es
reforzar o estimular conductas positivas; o bien, que la alumna o alumno
tome conciencia de una falta cometida, adquiera un compromiso de cambio y/o
actitud reparatoria. También, la reflexión colectiva, este es un diálogo entre
maestro y alumnos frente a diferentes situaciones que afectan positiva o
negativamente la convivencia escolar. Tiene como objetivo favorecer el bien
común promoviendo la autorregulación y el comportamiento
solidario
Todo lo antes expuesto se resume en las siguientes palabras, el
niño viene al mundo como una “tabula rasa” abierta a recibir sensaciones
externas fruto de las experiencias, que debe construir y nutrir su vida y
conocimientos a diario a través de las experiencias formales e informales que le
ofrezcan su comunidad, la escuela y el educador. Esto debe ser complementado con
la utilización de materiales que promuevan el interés y entendimiento en el niño
y tomando siempre en cuenta las virtudes y necesidades particulares. La vida se
basa de éxitos y logros, por eso hay que luchar por nuestra educación,
excelencia y profesionalismo. Los estudios representan la esencia de una vida
exitosa y extraordinaria. Estos representan la esperanza que ilumina un triunfo
futuro, el esmero por lograr algo importante y el desarrollo de las
inteligencias múltiples. Como decía el filósofo Pitágoras de Samos "Educar no es
dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida".
Referencias
Coll, C., Martín, E., Mauri, T., Miras, M., Onrubia, J. Solé, I., Zabala, A.
(1997). El constructivismo en el aula. Barcelona: GRAÓ, de IRIF,
S.L.
Hernández, E.R. (2005). Las inteligencias múltiples. Recuperado el 24 de noviembre
de 2012, de http://www.psicologia-online.com/infantil/inteligencias_multiples.shtml
Psicoactiva. (1998-2012). Biografías. Recuperado el 18 de noviembre de 2012,
de http://www.psicoactiva.com/bio/bio_13.htm
en la Universidad de Puerto Rico, recinto de Mayagüez. Mis estudios están
concentrados en Ciencia Política, con una secuencia curricular en Política
Exterior y una certificación de Educación, con especialidad en Estudios
Sociales. La educación es de suma importancia para mí y el hecho de ser futuro
maestro me enorgullece.
Aquí expongo mi filosofía educativa, la misma recoge ideas principales de teóricos
como: Jerome Bruner, Howard Gardner, B.F. Skinner, Comenio y John Locke. Mi
objetivo es aplicar las teorías del constructivismo, el aprendizaje
significativo, las inteligencias múltiples y el condicionamiento operante a la
sala de clase. Además, propongo desarrollar planes de modificación de conducta a
aquellos estudiantes que así lo ameriten. Como parte de la filosofía a presentar
expongo, de igual manera, lo que se enseña en el currículo, el rol del maestro,
el rol del estudiante y el de la comunidad en el proceso educativo.
Antes de comenzar una descripción detallada acerca de la filosofía es indispensable
explicar la base. Se parte de la creencia, “al momento del nacimiento la mente
es una tabula rasa, o sea, una pizarra en blanco en la que nada
hay; todas las ideas se forman a partir de los procesos sensoriales de la
visión, el oído, el gusto, el tacto y el olfato (John Locke). Ello es así porque
los seres humanos lo primero que desarrollamos es el tallo cerebral, este tiene
presente los actos reflejos que se producen como respuestas a estímulos
específicos recogidos por neuronas sensoriales, esto significa una respuesta
involuntaria. Entonces, se niega la idea de que nacemos con unos conocimientos
innatos. El niño entra en la escuela como un ente vacío y es allí donde se le
inculcan tanto los contenidos, como todos esos principios que se consideran
harán del mismo una persona de bien. Estos son los contenidos que ayudarán a
determinar lo que la persona haga o sienta durante toda su vida de
adulto.
El niño debe construir su propio conocimiento a través de ciertas experiencias que
le brindan la vida y aquellos conocimientos ofrecidos por el maestro en la
escuela. Esta es la creencia fundamental de la teoría constructivista que
sostiene, “el aprendizaje no es un sencillo asunto de transmisión y acumulación
de conocimientos, sino "un proceso activo" por parte del alumno que ensambla,
extiende, restaura e interpreta, y por lo tanto "construye" conocimientos
partiendo de su experiencia e integrándola con la información que recibe” (Coll,
1990).
Jerome Bruner, enmarcado en la teoría del constructivismo, indica que el aprendizaje se
realiza por descubrimiento. Como parte de su teoría de la instrucción, propone
que el material debe ser lógicamente significativo y que la organización de los
contenidos debe adecuarse a la estructura psicológica del alumno. La filosofía
descrita en este documento adopta el principio y, al igual que Bruner, considera
que la enseñanza debe: propiciar la construcción intelectual, fomentar la
reflexión y el aprendizaje de procedimiento para resolver problemas. Indica
además que nunca se debe fomentar la acumulación del conocimiento. Hay que
aprender con práctica, luego de tener bases firmes y claras sobre el material.
Una vez establecido este punto, el próximo paso es pensar con qué herramientas
construirá el estudiante su conocimiento. Para esto y como parte de esta
filosofía hago referencia al teórico Howard Gardner, creador de las
inteligencias múltiples. Si se reconoce que cada estudiante posee ciertas
inteligencias que lo ayudan a construir con más facilidad el conocimiento a
través de unas áreas en específico, entonces se contestará la pregunta inicial.
Entre las inteligencias identificadas se encuentran las siguientes: la
verbal-lingüística, lógico-matemática, corporal-kinestética, visual-espacial,
musical, intrapersonal e interpersonal. En adición a estas, se ha mencionado que
el estudiante puede aprender al apelar a sus sentimientos y emociones, por esto
se habla de la posible existencia de la inteligencia emocional o naturaleza
existencial. Lo importante es identificar las distintas inteligencias existentes
en la sala de clase y trabajar con estas de la manera más eficiente, de modo que
todos los estudiantes reciban una educación completa y
efectiva.
En el proceso continuo de la construcción del conocimiento es normal encontrarse
alguna vez con conductas inapropiadas que afecten y, de alguna manera, impidan
el aprendizaje deseado. En la teoría del condicionamiento operante de B. F.
Skinner es posible hallar la solución a este problema. Debido a que Skinner es
un conductista radical, esta filosofía sólo adoptará el principio de los
esfuerzos de los refuerzos y castigos, con el propósito de premiar o reprimir
una conducta. Este principio ayudará en el proceso de modificación de conducta
de un individuo. Con él se pretende apoyar el enfoque de la filosofía que aspira
a formar un individuo integral, que no sólo se encuentre saludable y se
desarrolle en el aspecto emocional, físico social y cognitivo, sino también
moral. Al modificar una conducta de manera positiva, el estudiante mostrará un
comportamiento que proporcionará los buenos valores entre los individuos de una
comunidad.
Los estudiantes y la educación encierran un tesoro, por ende estudiar es educarse,
es hacer de la vida una llena de grandes valores. Por lo que cada padre, maestro
y comunidad escolar debe luchar por la preparación que dará la educación a cada
niño. La educación preparará al ser humano a explorar mundos nuevos, interactuar
con la sociedad y valorarse. También, brindará las respuestas necesarias a las
exigencias sociales, así como la competitividad para insertarse en un mundo
globalizado y favorecido por las nuevas tecnologías. Nuestra preparación
educativa nos ayudará a alcanzar todas y cada una de las metas que nos
propongamos. De este modo, nos dará un sinnúmero de conocimientos que nos harán
seres humanos honestos, sencillos, verticales, leales, maduros y sabios,
logrando ser capacitados y asertivos ante cualquier
circunstancia.
Es de suma importancia saber para qué debe preparar la educación a los seres
humanos, pero es importante saber quiénes influyen en dicha educación. La
familia y la comunidad tienen roles muy importantes que nunca deben ignorarse.
Hay que tener presente que los padres son los primeros maestros de sus hijos, y
continúan en ese papel durante toda la educación de los mismos. El rol que tiene
un padre es el enseñar valores, costumbres y tradiciones, lenguaje adecuado,
entre otros aspectos que se verán reflejadas en el estudiante durante toda su
vida. Aspectos que la escuela y educación pueden moldear. Los padres y la
comunidad familiar son responsables de estimular a sus hijos a estudiar. Creando
en ellos características como la responsabilidad, la creatividad y a ser niños
aplicados. La única manera de desarrollar un potencial completo en un estudiante
es la comunicación total entre la escuela y el hogar. La responsabilidad de una
buena educación comienza por los padres ya que estos tienen la toma de
decisiones sobre sus hijos, que es muy importante. Al hijo ser menor, el padre
elige el centro educativo y son quienes inculcan valores que se reflejan en el
estilo de vida de cada cual. El objetivo principal que debe tomar en cuenta la
familia es un excelente desarrollo en la educación de sus hijos, sin buscar
alguien perfecto.
La educación debe mantener una organización, esa que se refleja en el currículo que
organiza lo que se va a enseñar y demás cosas de gran importancia. Lo primordial
es establecer metas y objetivos, luego han de identificarse las diversas fuentes
de conocimiento según las destrezas que se deseen enseñar. En general, se debe
enseñar legado histórico y cultural, investigación científica, tecnología,
matemática, lenguaje, y todo aquello que logra un desarrollo y evolución
positiva en el estudiante. En el currículo se presentan los diferentes
componentes y elementos del programa educativo. El mismo es centrado de acuerdo
a las necesidades y características de los estudiantes. En cuanto a la manera
que enseñaría, establecería metas, competencias, estándares y objetivos. Luego,
programaría las diversas actividades para facilitar un aprendizaje real y activo
en los estudiantes. En cuanto a lo que se debe enseñar, lo deciden en conjunto
la escuela, el maestro y el estudiante, según sea la necesidad de
estos.
En la filosofía integral, los roles de los distintos componentes del proceso de
enseñanza-aprendizaje juegan un papel crucial. Yo como maestro seré, más que un
facilitador, un mediador entre el estudiante y el ambiente. Crearé el escenario
apropiado para que el proceso de aprendizaje se dé efectivamente y con fluidez.
Brindando al estudiante las herramientas necesarias, para que puedan edificar
las inteligencias a través de actividades que vayan dirigidas a estos estilos de
aprendizaje. Como maestro, mis cualidades estarán centradas en ser un individuo
sensible y comprensivo, desempeñándome eficazmente en posiciones como las de
amigo, consejero y de ayuda médica de ser necesario. No voy a ser autoritario,
pero tampoco permisivo. Sólo trataré al grupo con cierta autoridad para que
ninguna de ambas partes pierda el debido respeto y se logre un control adecuado.
Para lograr esto voy a mantener un excelente manejo de la sala de clase y para
que esto, a su vez, se dé, reforzaré y aprenderé aquellas conductas que así lo
ameriten con actividades de motivación y estímulos adecuados.
Es importante tener en cuenta que la evaluación es parte de las actividades diarias
de la clase. Las leyes piden igualdad para todos, siendo un gesto de justicia.
De esta manera, yo como maestro utilizaré mi sistema de avalúo igual para todos,
pero ajustado a las necesidades de cada grupo en particular. Del mismo modo
exigiré disciplinas sin distinción de estudiante. Es importante ganarse el
respeto de estos, para poder exigirles sobre su comportamiento. También, tomaré
en cuenta las individualidades y etapas de desarrollo del estudiante para
asegurarme de llegar a todos por igual. Yo como maestro, para lograr lo antes
mencionado, voy a utilizar las diferencias que se le presentan como un potencial
que trae diversos talentos al grupo y los beneficia a todos. De este modo crearé
una ambiente que invite a todos a investigar, aprender, construir su aprendizaje
de manera sencilla y a lograr las metas a corto plazo e inculcar el deseo por
alcanzar las metas a largo plazo. Por último, y no menos importante, mantendré
una comunicación efectiva con los demás componentes del proceso educativo, es
decir, escuela, familia y comunidad.
La escuela deberá ser un lugar que atraiga al estudiante, empezando por el maestro
y terminando por ofrecer actividades que motiven al niño y adolecente. La
comunidad juega un papel importante ya que debe encaminarse a cooperar con ésta
última para lograr el cumplimiento de las metas propuestas y de los objetivos
que se tiene para con el estudiante. Todo es un ciclo, la comunidad participa de
la educación formal y cotidiana del niño, la escuela formalmente lo educa con el
propósito de formar un buen ciudadano que aporte de manera positiva a la
sociedad y participe de la educación de sus futuras generación con el mismo
fin.
Es necesario lograr desarrollar cualidades en los estudiante como: que sean
educados en el aspecto de escuchar al maestro, el compañerismo, la sinceridad,
la honestidad, ser respetuosos y luchadores y tener características de un
ciudadano de bien, que no es perfecto pero si una gran persona. El rol principal
del estudiante es aprender no solo el material que se enseña en la sala de
clase, sino también a formarse como ser humano. A ser una persona con valores,
moral y capacitada para contestar las interrogantes de quién en realidad es. El
estudiante deberá convertirse en el protagonista de su educación. El mismo debe
definir sus propias metas y proponerse métodos para alcanzarlas con éxitos. Es
un orgullo ver que a los estudiantes que yo inculque el gusto, la capacidad, el
placer de aprender, la curiosidad del intelecto y demás, se hagan grandes
profesionales. Lo que espero como maestro, es que esa semilla que logre poner en
la vida de cada estudiante, dé frutos. Y que los mismos logren todas sus metas y
se hagan seres humanos de bien.
Aunque parezca irrelevante, los materiales que se utilicen en el proceso
enseñanza-aprendizaje con la meta de lograr lo que se propone, son parte
importante de este ideal filosófico. Se debe hacer el uso de materiales que sean
de gran atracción al estudiante. Por ejemplo: textos llamativos que lleven la
información para un nivel apropiado para el entendimiento del alumno, que
trabaje temas y conceptos que sean parte del contexto de la vida del niño. El
material audiovisual debe ser apto para el novel a trabajar. Es recomendable
utilizar detalles coloridos, sin caer en el extremo, con la intención de
capturar la atención del estudiante y crear un ambiente propicio para todos. A
lo antes mencionado, es necesario integrar la tecnología que avanza de una
manera acelerada y hace la clase mucho más amena, integral y
activa.
Luego de haber culminado mi metodología, de haber observado la dinámica en una sala de
clase y de interactuar directamente en clases demostrativas me reafirmo en mi
filosofía educativa. Sostengo la necesidad de ser un facilitador y mediador con
cierta autoridad para mantener el control de grupo. Es necesario controlar las
conductas de los estudiantes y facilitar un aprendizaje claro, activo,
integrador y con materiales que promuevan lo antes mencionado. Luego de esta
experiencia me percato de la importancia y la necesidad de tener una integración
más completa entre los padres y la escuela. Este factor podría ser uno de gran
importancia al ver los resultados del aprendizaje de los estudiantes. Es
importante tener presente a los estudiantes de educación
especial y las necesidades que tengan cada uno de ellos para lograr una clase
eficaz, eficiente y que lleve una educación clara, precisa y completa.
Hasta el momento, en mi práctica docente, me reafirmo en todas
las partes de mi metodología. Por la cantidad de tiempo que he dado clase me he
percatado que es necesario reforzar y ampliar la parte de conducta.
Además del principio de los esfuerzos de los refuerzos y castigos del
condicionamiento operante de B. F. Skinner, es importante acoger varias
estrategias diversas que atiendan de manera efectiva los problemas de conducta.
Estímulo positivo, ese reconocimiento para valorar y destacar conductas que
manifiestan un compromiso sobresaliente, a través del reconocimiento verbal o escrito y estímulos o distinciones especiales. Es necesario destacar al estudiante que en una unidad específica se destaque por las siguientes virtudes y cualidades: sencillez, alegría, servicio,
creatividad, lealtad, esfuerzo y confianza en sí misma. También, es importante
premiar y resaltar las buenas conductas estas que provienen del mejor compañero
que haya sido bondadoso, generoso, solidario y que mantiene buenas relaciones
con todos y todas. Además, el gran estímulo de premiar el ejemplo, los
estudiantes que siguen las reglas del salón, al alumno que llegan siempre a
tiempo y no faltan, de este modo se busca que los demás compañeros se estimulen
por hacer lo que hacen sus compañeros premiados. Un aspecto muy importante que
destaco para que sea parte de mi filosofía es la reflexión individual, como
método para lidiar con las conductas. Esta es una conversación maestro alumno a
propósito de una situación que amerite un análisis. El objetivo es
reforzar o estimular conductas positivas; o bien, que la alumna o alumno
tome conciencia de una falta cometida, adquiera un compromiso de cambio y/o
actitud reparatoria. También, la reflexión colectiva, este es un diálogo entre
maestro y alumnos frente a diferentes situaciones que afectan positiva o
negativamente la convivencia escolar. Tiene como objetivo favorecer el bien
común promoviendo la autorregulación y el comportamiento
solidario
Todo lo antes expuesto se resume en las siguientes palabras, el
niño viene al mundo como una “tabula rasa” abierta a recibir sensaciones
externas fruto de las experiencias, que debe construir y nutrir su vida y
conocimientos a diario a través de las experiencias formales e informales que le
ofrezcan su comunidad, la escuela y el educador. Esto debe ser complementado con
la utilización de materiales que promuevan el interés y entendimiento en el niño
y tomando siempre en cuenta las virtudes y necesidades particulares. La vida se
basa de éxitos y logros, por eso hay que luchar por nuestra educación,
excelencia y profesionalismo. Los estudios representan la esencia de una vida
exitosa y extraordinaria. Estos representan la esperanza que ilumina un triunfo
futuro, el esmero por lograr algo importante y el desarrollo de las
inteligencias múltiples. Como decía el filósofo Pitágoras de Samos "Educar no es
dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida".
Referencias
Coll, C., Martín, E., Mauri, T., Miras, M., Onrubia, J. Solé, I., Zabala, A.
(1997). El constructivismo en el aula. Barcelona: GRAÓ, de IRIF,
S.L.
Hernández, E.R. (2005). Las inteligencias múltiples. Recuperado el 24 de noviembre
de 2012, de http://www.psicologia-online.com/infantil/inteligencias_multiples.shtml
Psicoactiva. (1998-2012). Biografías. Recuperado el 18 de noviembre de 2012,
de http://www.psicoactiva.com/bio/bio_13.htm